La gestión del agua y los residuos, pilares de la minería en Colombia
El 1,6 % del PIB de Colombia lo produce el sector minero-energético; es decir, alrededor de $15,6 billones.
Los principales retos ambientales de la minería son el alto consumo y contaminación de agua y su tratamiento, así como la gestión de los residuos peligrosos que resultan de esta actividad. Los metales pesados como el oro, bronce y algunos minerales, así como la extracción de carbón, son los más explotados en Colombia, trayendo consigo oportunidades de crecimiento económico y también retos ambientales, legales y sociales.
Es así como desde el Gobierno Nacional se han ajustado y adaptado nuevas tecnologías para hacer del sector minero-energético más amigable con el medio ambiente y más responsable desde todos los puntos de vista, como el social.
En ese sentido, es de vital importancia que las empresas mineras en el país establezcan y mantengan la sostenibilidad operacional, reutilicen los residuos, rehabiliten las instalaciones y mejoren su productividad, ya que es una de las industrias de uso intensivo de agua y generadoras de residuos que, si no se gestionan adecuadamente, pueden generar impactos que van más allá de sus comunidades aledañas.
Por ello, el enfoque de las estrategias de sostenibilidad de este sector debe centrarse en el reúso y tratamiento responsable del agua con el gran objetivo de convertirse en cero descarga líquida y circularidad de residuos que mantengan un entorno seguro, transparente y con oportunidades de impulsar la economía local.
De hecho, existen tecnologías y procesos que permiten un correcto reciclaje de las aguas residuales, estas aguas contaminadas se conducen a unidades de tratamiento industrial específicas, la tecnología de estas soluciones se adapta al nivel de contaminación del agua que puede ser bombeada desde el lugar de extracción u otros procesos mineros.
Por ejemplo, los efluentes o residuos pueden ser almacenados en lagunas para evitar su descarga en el medio ambiente, se decantan, luego se bombean o se tratan. Las tecnologías de separación pueden utilizarse para recuperar y reutilizar las pequeñas concentraciones de metales preciosos en estas aguas. Los contaminantes específicos de la industria minera como ácidos, metales pesados, cianuros, arsénicos y otros materiales peligrosos se destruyen o se neutralizan.
vEsto abre la oportunidad para la construcción de Parques Tecnológicos Ambientales dentro de las minas, éstos, pueden hacer la gestión integral de residuos derivados del tratamiento de aguas residuales, como la gestión de lodos contaminados, residuos peligrosos y aprovechables sin afectar a las comunidades, es más, pueden recibir los residuos de estas comunidades para producir biogas y generar electricidad en minas activas o cerradas.Estas soluciones industriales de Veolia descritas anteriormente, preservan los recursos hídricos, recuperan los subproductos minerales y reducen los costos de operación para crear valor en la industria minera a corto y en especial, a largo plazo. De esta manera, han logrado el 85% de recirculación de agua en las minas en las que operan como gestión responsable y económicamente rentable para los clientes y su transformación ecológica.
Vale la pena recordar que, en el país se han ido buscando alternativas para tener una diversificación de la canasta minera, ya que ha sido un sector que ha dependido de manera significativa de solo un producto, el carbón térmico, del cual hay abundancia en Colombia. Al respecto, se han identificado nuevas oportunidades en minerales metálicos para diversificar la canasta, elementos que son necesarios para la transición energética. Estas apuntaron a otros minerales como el oro, que es un activo refugio y que logró subir de precio y aumentar la demanda de 20 %.
Fuente: Portafolio